colchones viscoelasticos flex

Qué colchón elegir para no pasar calor

Los colchones viscoelásticos Flex pueden ser la solución tanto para quienes dan mil vueltas en la cama molestando al de al lado como para quien no puede pegar ojo por culpa del calor. ¿Qué colchón elegir para dormir 100% a gusto? 

Lo primero que tenemos que tener claro es que un colchón no va a regular la temperatura como un aparato de aire acondicionado. Eso sí, hay determinados factores en los que podemos intervenir para procurarnos un descanso de calidad. En lo relativo al calor, hablamos de la transpirabilidad y el uso de los materiales termorreguladores.

La transpirabilidad del colchón

Si el colchón permite el paso de aire a través de sus componentes lograremos que el calor del cuerpo se disipe y no se acumule. Podemos clasificar los materiales de mayor a menor transpirabilidad de la siguiente forma: 

Muelles

El núcleo del colchón es la carcasa de muelles, la que garantizará un buen apoyo y durabilidad. Generalmente va reforzada y tratada térmicamente para aumentar la vida útil de los muelles. También es importante la cantidad de muelles. A más número por metro cuadrado, mejor apoyo tendrá el cuerpo. La dureza del colchón se logra cambiando el diámetro del alambre de acero y no disminuyendo la cantidad de muelles.

A ambos lados de la carcasa van varias capas de acolchados (espuma de poliuretano, látex, viscoelástica o rellenos naturales como lana y algodón) para no notar los muelles y disfrutar de un tacto mullido y confortable. Muchos de los colchones de Colchonerías Miluna tienen una cara de invierno y otra de verano.

Espumaciones

Los núcleos de espumación son de un material líquido y gelatinoso con aire comprimido inyectado. Se trata con endurecedores y resinas estabilizadoras para lograr un bloque homogéneo. Las burbujas de aire y el material poroso procuran una buena y flexible superficie de apoyo. Las espumaciones se fabrican con látex, poliuretano, resinas, etc. 

Látex

Colchones fabricados a partir de la resina del árbol del caucho, junto con endurecedores y antioxidantes. Es un producto orgánico que necesita de resinas endurecedoras y productos estabilizantes para que se convierta en un bloque sólido, estable y duradero. Se caracteriza por su gran capacidad de adaptación, su elasticidad y la reducción de puntos de presión.